sábado, 9 de febrero de 2019

Desadaptaddo

Si crees que vivo fuera de tono; puede que algo de pena me dé la situación. No todos tenemos el privilegio de contar con la innata capacidad de aferrarnos a la estética social, sacrificando nuestras emociones; vivo con lo que Dios me dio, y lo que a golpe y sudor pude mejorar.

Si piensas que mis actos vitales son contrarios al decoro, narrativa y expectativa social… quizás esté mintiendo, pero te replico: vivo una vida instintiva, noble y natural; porque hay algo que, al parecer, no tienes presente en tu mirar y condenar: y es que los desadaptados, también tenemos un corazón. No puedo negarme a amar en la forma que amo, por no estar a la altura del protocolo ornamental del mundo; esto es lo mejor que puedo apostar.

Tú con todo tu talento olvidaste lo principal: y es que quienes somos desadaptados, también tenemos un pecho que pulsa... que pulsa un emocionado, un desgarrado, un desvalido… pero siempre pulsa… pulsa un corazón.